Ambientada en el cementerio de Highgate, en Londres, con 200 años de antigüedad, Vida en un Lugar de Muerte explora el concepto de la percepción de la humanidad sobre su dominio sobre la naturaleza.

Visitantes de todo el mundo acuden para rendir homenaje a seres queridos perdidos y a figuras icónicas como Karl Marx y Christina Rossetti, buscando consuelo entre los senderos serpenteantes y las elegantes lápidas. Sin embargo, en medio de la melancólica belleza de este lugar solemne, la vida prospera: búhos chillones cazan ratones entre las tumbas, raras arañas tejedoras dan a luz a sus crías en las esquinas húmedas y oscuras del mausoleo, y juguetones cachorros de zorro emergen de madrigueras subterráneas cada primavera.

En el corazón de esta historia se encuentra el tema de la coexistencia entre humanos y animales no humanos. Cada personaje y especie recibe la misma importancia: desde el sepulturero que depende del micelio para ligar el suelo, hasta la rescatadora de animales que trata a los zorros con sarna, pasando por el jardinero que retira cuidadosamente las botellas de plástico vacías del montón de compost. El majestuoso roble se alimenta de materia orgánica reciclada en el suelo, mientras que su copa es cuidada por un cirujano que la libera del tizón. Juntas, estas historias entrelazadas pintan un vívido retrato del delicado equilibrio entre los humanos y el mundo natural.